LIBERA pide sustituir los gansos de Lekeitio... por EnVerde
La asociación Internacional para la Defensa de los Derechos de los Animales, Libera, solicitó al Ayuntamiento de Lekeitio, País Vasco, la sustitución por gansos de goma de los animales de verdad utilizados hasta la fecha en el 'Antzar eguna'.
Pero las tradiciones pueden modificarse o evolucionar. En el caso de Lekeitio la se modificó hace unos años porque se impuso la realidad de las medidas que se tomaban en toda Europa debido a la crisis de la gripe aviar. La fiesta continuó; pero se sustituyó el ganso por una imitación de goma que funcionaba muy bien.
Inexplicablemente a alguien decidió cambiar el prototipo de goma por otro de verdad; aunque en esta ocasión ya muerto. Esta situación ha puesto en alerta a la asociación Internacional para la Defensa de los Derechos de los Animales, Libera, que emitió una nota recordando a las autoridades que Euskadi está adherida a la Declaración Universal de los Derechos de los Animales, y la práctica del ganso de Lekeitio contraviene varios puntos de dicha declaración.
Dicha declaración dice en su artículo 10 que "Ningún animal debe ser explotado para esparcimiento del hombre y que las exhibiciones de animales y los espectáculos que se sirvan de animales son incompatibles con la dignidad del animal".
Tradicionalmente y hasta no hace tantos años, esos gansos se colgaban vivos. Poco antes de la gripe aviar, muertos, lo que no deja de ser una salvajada, durante aquella, de plástico o goma. Pasado el peligro de epidemia, desgraciadamente, no tiene nada de inexplicable que se vuelva a las andadas, es... “cultura”, ¿no? ¡Pues NO! Es una aberración.
ResponderEliminarHay algunas cosas que me gustan de España, desde luego, pero hay bastantes que no. Una constante en este segundo grupo es la gran cantidad de festejos que hay por toda España en los que se torturan o matan animales por pura diversión. Es inadmisible y vergonzoso por sí mismo.
Conocí de niño a la pareja de osos que había en el parque de San Francisco, Petra y Perico. Siempre que me llevaban a Oviedo, y era muy niño, quería ver la catedral y a Petra; pero siempre salía con pena del parque. Nací y viví en Asturias hasta los 25 años y no recuerdo que en las fiestas se utilizasen animales, salvo las corridas de toros en las fiestas de Gijón, Oviedo y Candás. Si estoy equivocado, agradecería que alguien me corrija, porque he presumido de ello en todos los lugares que estuve por el resto de España.
Parece mentira que estemos en el siglo XXI, no me gustan los zoos, circos ni acuarios, además, hasta científicamente sabemos que apenas nos separan unos pocos genes de cualquier animal, ¡no es tan difícil imaginarse en su piel! Cada vez llevo peor los veranos de este país, parece que el sol de España es un reflejo del infierno.
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